Restaurante Aljaima

Siempre que voy me encanta, la comida siempre está muy buena, son rápidos y muy amables.

Todo delicioso y la atención muy buena! El hombre es encantador, gran calidad de los alimentos. Y muchaaas opciones sin gluten (celiacos). Pedimos bastela, cuscús de cordero (de quinoa), tagine de cordero con ciruelas, tarta de queso y té. Precio unos 70€ (3 personas), quedamos muy saciados. Restaurante muy recomendable

El espacio me gustó en cuanto a decoración y al hacer un poco de calor tenían varios ventiladores que de forma atenta dirigían donde estábamos para que nadie pasará calor. La reserva la teníamos a las 15h y no hubo problema en adelantarnos. Tienen la bastela premiada, pero esta vez quisimos probar los briwat que nunca los habíamos comido, son como unos rollitos de hojaldre fino con carne picada, se supone que marisco ( no se apreciaba bien y no estoy segura si era mezcla o que podías elegir y se entendió que las queríamos de carne), verduras y algo de pimentón picante,fuera como fuera estaban muy ricos. Después para comparti pedimos cuscús de pollo con pasas caramelizadas y tagine de pollo al limón muy suave todo la verdad es que si le pones el caldo del tagine al cuscús estaba riquísimo todo. En comparación con otros restaurantes de cocina árabe este tiene un tamaño de plato más generoso y de precio muy bien. El pan que te ponen también está muy rico y en esta ocasión no pudimos probar el postre, pero volveremos. El personal es muy atento y agradable y el ambiente era tranquilo.

Sorprendente. Hemos ido sin planearlo y ha sido una grata sorpresa. La atención ha sido muy buena. El ambiente del local es elegante y tranquilo. La comida deliciosa; hemos comido babaghanouj, rollo de queso a la miel y bastela, todo muy rico. Para finalizar hemos pedido un postre y degustado un rico té, servido por el dueño, muy rico. La relación calidad precio es excelente. Sin duda un sitio para repetir.

Si queréis disfrutar de una auténtica comida marroquí en Almería, no dudéis en visitar este restaurante. No es que la comida esté espectacular, es sublime, nos trasladamos a Marruecos en cada bocado. El dueño es familiar, muy cortés y servicial, nos hizo sentir muy agusto. Restaurante extremadamente limpio y con una decoración preciosa, hay unas fotografías (realizadas por él) en la pared que no puedes dejar de mirar, son espectaculares. Una pena que nos pille tan lejos para volver, pero si pudiéramos, iríamos todas las semanas porque es de los mejores marroquíes donde hemos disfrutado con los 5 sentidos de nuestro almuerzo. 100% recomendable

La comida es casera y no está mal, aunque tampoco hacen el mejor cous cous. El precio ha subido bastante y es caro en relación calidad-precio. Por dos refrescos, una bastela y un entrante (4 briwat): 33€. La verdad es que antes hacían la comida más sabrosa y a precios más adsequibles.

Sencillamente maravilloso. Nos dejamos aconsejar por el dueño en cuanto a la combinación de sabores y hemos salido encantados! Nos comenta que lo cocinan como lo hacían en casa y es increíble. Era la primera vez que probamos un marroquí y ha mejorado las expectativas. Además el precio es muy bueno. El trato y el servicio también perfectos, así que mis 5*

Fue todo un descubrimiento, desde la decoración, olores, sabores, etc.. La comida es muy buena y de calidad en su totalidad. El servicio está atento pese a estar una persona sola en sala. El precio está contenido y es asumible. ¡¡Totalmente recomendable!!