Bar Begoña

Ayer se nos ocurrió ir a cenar a algún lugar donde hiciera tiempo que no hubiéramos estado… A mi cabeza se vino El Begoñina por su increíble rollo de bonito y sus chipis rellenos. Una vez más, no defraudó. Raciones abundantes y relación calidad precio muy bien. Además atendiéndonos muy amablemente, Sara, más maja que las pesetas. Comimos genial y nos fuimos con ganas de volver pronto. Por semana ambiente muy tranquilo y relajado.

Un lugar que desde fuera parece poca cosa pero donde se come fantástico. El cachopo es muy especial: tiene un rebozado de huevo, sin pan rallado, y va cocinado en salsa con champiñones. La carne está tiernísima, el queso y el jamón del relleno están en su punto y pueden comer tres de una sola ración. El pastel de cabracho es casero y delicioso, como la salsa rosa que lo qcompaña. Los mejillones están magníficos, su salsa está para chuparse los dedos. Finalmente, la tarta de la abuela está riquísima, con capas de galleta, crema pastelera y chocolate. Un lugar verdaderamente recomendable, se aconseja reservar.

De los mejores cachopos que hemos comido por Gijón, la carne de calidad, tierna, sin nada de grasa, con patatas, riquísimo. La atención muy buena, muy amables. El precio pues bueno, cada bolsillo es un mundo. Y el local muy acogedor, nos ha gustado mucho. Sin duda repetiremos.

Ir al Begoña a comer es un éxito seguro. Comida casera, servicio rápido y a buen precio. Aún recuerdo de niños cuando pasábamos corriendo por el bar, para cruzar de una calle a otra sin tener que dar la vuelta. Elegimos menú un sábado, pote, parroches y cachopo. Fenomenal!

Comimos a la carta y no nos convenció. Comida muy simplona y precios elevados. Los postres fue lo que más nos gusto, hacen un buen arroz con leche asturiano. La atención agradable.

Salimos encantados con lo que comimos allí y con ganas de repetir. Para los que me lean, quiero compartir mi experiencia y dar algode información: - Es un bar de los de toda la vida (aquí en Asturias típicamente llamado "chigre"), por lo que no os esperéis llegar y encontraros con un restaurante con parafernalias y detalles bonitos porque no es el caso... aquí se viene a comer muyyyyyy bien, y punto. - El bar está bien... típico de los de antes. De hecho, es del año 1971, aunque tristemente no lo conocíamos pese a ser típico, hasta ahora. - Aparte del bar, tiene una sala aparte que es el comedor, y aunque es sencillo, se está bien y tranquilo. - El servicio es rápido, con una atención correcta y cordial. - LO IMPORTANTE, LA COMIDA ... veníamos a tiro fijo por su CACHOPO DE TERNERA GUISADA... y he de decir que tras comer muchos de diferentes lugares, no sabría decir si ha sido el mejor de todos los probados, pero sí me atrevo a decir que fue de los mejores. Estaba espectacular (riquísimo). En su punto, fino, compacto, carne tierna (suave, sabrosa y que se desacia en la boca), con un rebozado justito que además (punto muy importante) no se desmigaba... a los que no les guste mucho los rebozados, pueden estar tranquilos porque es perfecto... y aquellas personas que "depilen" los cachopos, os aviso que éste os será imposible. En resumidas cuentas, su cachopo es espectacular, riquísimo, buenísimo, sabrosísimo... Aparte pedimos un arroz con potarro en su tinta (muy rico) y ensaladilla rusa (muy buena), además de dos postres (arroz con leche muy rico, y tarta de queso ESPECTACULAR). Fueron dos menús por 16 € cada uno, así que de precio diría que excelente. Ya mismo estamos recomendándolo a nuestros círculos de amigos y conocidos. - Aparte del menú y su buen precio, tienen a elegir a ka carta. Aquí quizás se quedan algo cortos... tienen cosas muy interesantes (aparte de su típico cachopo de ternera guisada, es típico también los chipirones rellenos), Pero esto esto es solo una tontería mía - APARCAMIENTO: aviso sobre todo para los que vengan de fuera... Es difícil aparcar. Más vale dejar el coche en (por ejemplo) el Molinón, y dar un paseo hasta este magnífico bar por su paseo del muro (playa San Lorenzo) y que es muy bonito.

Grata experiencia en Cimadevilla, Gijón. Bar tradicional y concurrido. Probamos su cocina casera cómo menú del dia y comimos de categoría.... Buena atención, la camarera muy amable y la comida muy buena y en su punto. 13€/PAX... Bueno, bonito y barato. Para repetir!!

Un clásico de Gijon al que no se puede faltar al menos una vez en el verano, aunque es muy probable que este hasta arriba, sobre todo los fines de semana. Sin ser nada espectacular y con una carta ajustada, nunca falla. La carne guisada, el rollo de bonito y los calamares son típicos platos que llevan haciendo toda la vida. Como fuimos temprano, el servicio fue rápido y correcto, aunque a veces hay que esperar un poco. El requeson con miel es lo que me comi antes de hacer la foto.