Baserriberri

Lo recomendaría como una muy buena experiencia para iniciarse en el mundo de los menús degustación. Fuimos con mi pareja y, aunque al principio nos porqué vimos que el local estaba a reventar y no sabíamos dónde comeríamos el menú, rápidamente el personal nos señalizó amablemente que debíamos dirigirnos al comedor del final del restaurante donde el ambiente cambió por completo. Espacio bastante singular, cocina abierta y detalles muy bien cuidados. Seleccionamos el menú de 7 pasos. La propuesta gastronómica nos gustó bastante, iniciado por platos bastante vegetarianos donde realmente saben realzar los sabores de los vegetales, seguido de pescado y carne (todo en su punto) y finalizando con un toque dulce de fresa y unos petit fours de chocolate. Fuera de carta pedimos también su versión del huevo kinder que nos llamó bastante la atención y no nos decepcionó. El servicio durante toda la comida fue muy bueno aunque si que es cierto que tuvimos que pedir un par de veces el huevo kinder y la espera se hizo larga (nos dio la sensación en algún momento que se les había olvidado pedirlo). Nos queda pendiente volver para probar sus pintxos premiados en nuestra próxima visita a la ciudad!

Cenamos 8 personas el menú. Voy a comentar lo que para mí es positivo y lo negativo. Positivo: la comida está buena. Es cocina muy elaborada con buenas presentaciones. Está bien. El local me pareció bonito y agradable y la atención es buena. Negativo: Comimos un menú degustación aunque queríamos comer a la carta pero es que casi no nos quedó "otro remedio". La carta es muy corta y con precios elevados (hubo un momento que pensé que me faltaba alguna hoja en la carta) y al final pues parece que te dirigen a pedir el menú. Y un detalle, el jefe de sala nos puso la servilleta en las piernas y servía primero a las mujeres y después a los hombres y creo que eso está ya un poco "caduco" no??

Nos ha decepcionado bastante. Fuimos porque vimos que tenían premios algunas de sus tapas y venían bien presentadas, pero es más la apariencia que otra cosa, de sabor y cantidad nos sorprendió para mal. Pedimos el menú para compartir de 25€ y ya veis en las fotos la cantidad que venía... El postre pone que es sorpresa y era helado de dulce de leche que no nos gusta nada, no nos lo quisieron cambiar y lo dejamos entero.

Muy atentos, profesionales en todo momento, todo lo que comimos espectacular, en especial las costillas de Angus a baja temperatura con salsa de mango, tortitas y 3 salsas, siracha, pico de gallo y otra salsa que no me acuerdo. Que puedo decir riquísimo.

Fuimos a Pamplona la semana pasada a un festival y, los cuatro días que estuvimos fuimos asiduos a este bar. Los camareros fueron súper atentos y nos trataron genial, la comida estaba muy rica y los postres espectaculares (especialmente el huevo kinder). Como fuimos tantas veces nos dio tiempo a probar gran parte de la carta, a destacar la bombeja (brioche de leche con cordero), el ovni (hojaldre relleno de pollo thai y anguila), las rabas (las mejores que he comido) y las croquetas (todas). Cuando volvamos a Pamplona repetiremos, esperamos volver a veros pronto!

Completamente decepcionante. Caro e insípido. Fuimos porque nos llamó la atención la carta de pintxos y pedimos el menú que tienen por 25€. Deja mucho que desear. La croqueta de pulpo y jamón ibérico no sabía ni a pulpo ni a jamón ibérico. El ceviche lleva unos kikos que le dan un sabor y una textura malísima. El sándwich de rabo de toro casi no lo vemos en el plato de lo pequeño que era y su saber inexistente. El perrito de salchicha de toro se suponia que llevaba pan brioche y se parecía más al pan que compramos todos en el supermercado que a un pan brioche, de la salchicha poco tengo que decir, sosa. También pedimos la ensaladilla por 17 euros. Ni se os ocurra pedirla. Es patata con ensaladilla que parece prefabricada de supermercado y un supuesto atún rojo a la parrilla que tenía más parecido a un salmón crudo. Es cierto que los pintxos parecen elaborados pero hasta ahí, nada de un sabor acorde a lo que parece, 47€ tirados a la basura. Lo único bueno que puedo decir es que el personal es amable y atento.

Espectacular explosión de sabores sus tapas, muy recomendables las palomitas y la croqueta de pulpo (croctoctopussy) además espectacular presentación la Boomveja. Si hay q ponerle un pero.. Es que es algo pequeño la zona del bar, pero el restaurante es espectacular de grande y tranquilo(2 ambientes diferenciados). Muy recomendable.

El menú de 7 platos es espectacular. Local bonito, situado en el dentro de Pamplona, famoso por sus premiados pinchos pero cuyo menú nos encantó. Buenísima atención y servicio. Repetiremos!