Duality bar & food

Un Bar/Restaurante muy acogedor el cual cuenta con una buena variedad de tapas y una carta de comida muy apetitosa. Es conveniente reservar antes de ir, dado que el local es pequeño. La comida es exquisita, buena elaboración y buena cantidad en todos los aspectos. Sin duda alguna un lugar que te sorprenderá.

Local muy agradable en la zona de la Palomera. Es pequeño y acogedor, el servicio muy atento y lo mejor es la comida, las hamburguesas están riquísimas! Probamos, entre ellas, la Turner que es la que va a concurso y está de vicio. En el Tonkaktsu el filete quizás era algo grueso pero se comía bien.

La comida está muy rica, cada vez que voy pruebo algo diferente pero de momento muy bien, las burguer no son gigantes tienen un tamaño normal pero son consistentes, llenan, que no te quedas con hambre, la atención es buena, lugar agradable con gusto y limpio. El precio es un poco más caro que una hamburguesa normal, merece la pena pagarlo. Sin duda un lugar que puedes frecuentar cualquier día para comerte una buena hamburguesa

INCREÍBLE. Encontramos mesa por casualidad al haberse anulado en la llamada anterior una. Local muy acogedor y chulo. Carta no muy larga pero suficiente para ir cinco o seis veces y no repetir. Croquetas de torreznos, que sabor. Pollo takashi posiblemente el pollo crujiente más rico que haya probado, con una salsa muy rica y el marinado impresionante. Las hamburguesas pedimos la TURNER y la GOYA, que mezcla de sabores más rica. Alguien ponía por aquí que eran pequeñas, de pequeña tienen poco, son lo justo pa pedir un entrante y si tienes el estómago de un jabalí igual hasta un postre. De verdad q volveremos seguro. La tarta de queso tenía una pinta buenísima y hay q volver a probarla. Pues volvimos y probamos las tartas de queso y la de zanahoria, muy ricas, pero más la de queso con recubrimiento de crema de avellana. Las patatas con queso chedar y pico de muy buenas también. Para volver

Las burger estaban de vicio, pedimos la Turner y la Frida, deliciosas. De entrante pedimos unas patatas. El servicio fue un poco lento y el local aunque es pequeño está muy cuco, personalmente las mesas altas y pequeñas no me gustan pero eso ya es mi gusto. En fin, las Burger lo petan.

Un sitio para repetir y repetir. La comida deliciosa y el servicio espectacular. Personal encantadores. Hamburguesas muy elaboradas y diferentes, acompañadas de una patatas increíblemente ricas. El pollo marinado es para no perdérselo.

Sitio original con una apuesta firme por hamburguesas de calidad y diferenciadoras. Hasta aquí todo bien, pero he de ser justo con la experiencia ya que no fue del todo positiva, los motivos: - Pedimos 4 hamburguesas Turner. Preguntamos cual era el punto de la carne (a mi me gusta al punto o punto menos). Nos comentaron que venía al punto. De las cuatro, una estaba muy seca y totalmente pasada, justo la que me tocó a mí. - Preguntamos si el guacamole de los nachos lo hacían en el restaurante y la camarera dudó a la hora de responder. Dijo que sí, la realidad es que nos dió otra sensación al probarlo. - Bebidas: En un menú donde abunda la sal, los refrescos son de 237ml y los botellines de agua de 33cl, escasos. Pese a ello, le daremos otra oportunidad y si mejora, subiré la puntuación.

Fui a cenar con unas amigas. Yo pedí una Goya y ellas la Frida. Si avisaban en la carta de en qué consistía la Frida, ninguna lo vimos. Al poco de pedir, les trajeron un babero y unos guantes. Y al servirla les echaron todo el queso por fuera: imposible comerla sin ensuciarte y pudiendo parar a beber o comer algo más sin poner todo perdido. La carne de la Goya estaba sabrosa, pero llevaba tantos ingredientes más que apenas se podía disfrutar del sabor de la carne. La tarta que pedimos de postre (una red velvet) no solo no estaba fría (llevando nata debería estar refrigerada) sino que se veía que era de hace días (se notaba muchísimo en la nata decorativa). El trato tampoco fue el mejor. A las 22:30 nos dijeron que nos teníamos que ir, cuando estaban casi todas las mesas vacías. Mucho que mejorar.