Parador de Zamora

Fuimos 4 parejas al gran premio de moto GP en Jerez. Mi marido y yo viajamos en coche, el resto en moto. El domingo salimos tarde del circuito debido al trafico y en la carretera tambien había mucho tràfico y aun encima un desvío porque la autopista tiene un tramo considerable cortado. En fin, que se nos echó la noche encima y los pobres que iban en moto estaban pasandolo regular, cansados y con bastante frio aunque iban bien equipados. Los que ibamos en coche llamamos al parador para decir que llegariamos a una hora en la que el comedor estaria cerrado y ya nos dijeron de recepcion que intentarian solucionarlo. Llegamos los que ibamos en coche y la encargada de cocina, Esmeralda, nos tomò la comanda y nos prrparó una mesa en un salon en exclusiva para nosotros ya que el comedor y la cocina iban a cerrar cunado nuestros compañeros motetos llegasen. Cuando por fin llegaron se encontraron con el personal de recepcion dandoles la bienvenida en la puerta, agilizando el check-in una barbaridad, y con una mesa puesta en un salon precioso, los recibimos con buen vino de toro y comida caliente que los reconfortó y subió el ànimo. Esmeralda se quedó sirvièndonos hasta traernos los postres y cafes y luego se retiró para dejarnos prolongar la sobremesa cuanto quisieramos. La cocina y el comedor ya se habian cerrado hace tiempo. Un lujo. El parador es una preciosidad y las habitaciones son amplias, estàn calentitas sin racanear la calefaccion, las camas cómodas y grandes...|Muchas gracias. Volveremos otra vez con mas calma

La verdad no me alojé en el parador, simplemente fuimos a tomar algo después de comer. El servicio ni se ha acercado a lo que yo conozco de Paradores, tuvimos que ir a buscar 3 sillas para sentarnos en una mesa, nos limpiaron la mesa tirando las migas al suelo... Los gin tonic los prepararon como en el bar de mi pueblo, en caso alto ancho, ni siquiera una copa... El café irlandés terrible... No sé, la decepción más grande ha sido el trato, además de la falta de mimo, cariño y profesionalidad. Una decepción muy grande a precio de parador

El trato del servicio es muy profesional y agradable. El parador y sus infraestructuras necesitan una reforma y revisión de la decoración. El edificio es un tesoro si pasara por un restyling. Por las ventanas de madera entra el frío y a efectos energéticos tampoco creo que sea lo más eficiente. Los baños están para renovar e incluso los muebles en ocasiones denotan algo de desgaste. Recomendaría otros paradores en los que he estado x el mismo precio pero los animo a trabajar en ello.

Es un antiguo palacio de los condes de Alba de Aliste. Un precioso palacio renacentista del siglo XV construido en el centro de la ciudad. El edificio es de apariencia militar e interior refinado. Destaca el magnífico patio renacentista con galería acristalada de madera y escudos heráldicos. La decoración es de estilo medieval, como muestran las armaduras, los tapices nobiliarios y las camas con dosel.

El edificio es un palacio muy bien acondicionado y digno de verse. La ubicación es inmejorable. La atención y el servicio muy buenos. Muy buen desayuno. Fue una estancia muy grata.

El parador es precioso, habitaciones muy buenas y la ubicación magnífica. El servicio normal. Pero nos decepcionó mucho el desayuno. Íbamos con mi hijo, al que le encantan los bufets. Nos parecía que 19€ por cabeza era muy caro... pero como era el cumpleaños de mi hijo decidimos que valía la pena gastar ese dinero para que él disfrutara. Vaya decepción!! Nada especial... el peor de todos los paradores dónde hemos estado, que siempre nos ha parecido unos desayunos de lujo y por eso lo cogimos. Al día siguiente en Salamanca en un hotel normal, con un precio la mitad que ese... El bufet era estupendo con más variedad de todo. No lo recomendamos, es demasiado caro para lo que hay.

Un lugar simplemente magnífico. El enclave, el ambiente... Pero......en el servicio de cafetería tomar una pasta "Aceitada Zamorana" al precio de CINCO EUROS cada una... es algo preocupante para el consumidor. Tras ponerme en contacto con su personal corrigieron un error evidente, su profesionalismo y disposición para resolver este inconveniente han sido notables. Sin duda, su compromiso con la satisfacción del cliente refleja la calidad de su establecimiento.

Alojarte en un lugar histórico, eso tienen en Paradores, un lugar increíble en el centro de Zamora, con la cantidad de sitios que ver que hay en esta ciudad. Gracias a Zacarías por su gestión en el tema del aparcamiento de nuestro vehículo, sin ella no hubiéramos podido realizar la ruta que teníamos pensado hacer. Las habitaciones y los baños son amplios, aunque si que necesitan algo de "pintura" y remate de desconchones varios. Desayuno excelente, por toda la variedad de productos que ofrece y la calidad de los mismos. Poder ir andando/paseando a todos los sitios interesantes de Zamora es muy valorable. Se puede repetir sin duda.