Restaurante La Venta

Hemos estado en Semana Santa por Cuenca y decidimos comer el La Venta toda la familia . Os aconsejo que hagáis reserva ya que el lugar es pequeñito y se llena pronto, aunque eramos un grupo grande había más comensales. Tiene además de carta, varios menús. La comida estaba rica y el servicio era agradable.

Fantástico restaurante cuya visita es indispensable si visitas Cuenca en algún momento. En primer lugar, el local es precioso y tranquilo. Decorado con muy buen gusto. Puede parecer que es un restaurante caro a simple vista por la clase que tiene, por el contrario es un sitio cuyos platos están a muy buen precio, barato incluso dada la calidad y la cantidad de la comida. Nosotros pedimos el menú de día que costaba 15€ por persona incluyendo primer y segundo plato, bebida, postre y pan. La comida estaba deliciosa. Todo hecho a la perfección. Una de las cosas que pedimos fue la presa y ha sido la mejor que hemos comido nunca. Por otro lado, platos abundantes, la cantidad justa. Sin duda no te quedas con hambre. Por último, resaltar el trato del servicio. Amables, muy profesionales, cercanos y con gran sentido del humor, algo que nos hizo disfrutar más aún si cabe de nuestra experiencia. Recomendadísimo.

Fuimos a comer mi mujer y yo sin reservar, y el dueño amablemente nos emplazó más tarde, y nos dió una mesa. La comida buenísima, de gran calidad y perfectamente cocinada. Nos encantó el bacalao (se deshacía), y el rabo de vacuno (gelatinoso y se deshacía también). Cabe destacar también los huevos rotos con polvo de jamón, y los postres buenísimos. La verdad es que no elegimos nada, dejamos al critério del dueño, Manolo, muy amable, lo cual fue un acierto. Un verdadero placer para el paladar. Y el precio muy bien también. Volveremos.

Comida muy rica y atención perfecta. Lo único que no recomendamos es la tarta de queso, el resto estaba espectacular todo.

Parada obligatoria si visitas Cuenca, ya que la comida fue exquisita, de gran calidad y a un precio muy económico. Además, el servicio fue muy agradable, en todo momento fueron súper simpáticos y nos atendieron de lujo, incluso el ambiente era muy bonito y acogedor, por lo que fue una experiencia gastronómica maravillosa

Excelente atención, hemos pedido el menú y hemos flipado con el saber del plato Solomillo enrollado con Bacon, un sabor único, exquisito y en la boca era una completa delicia, sin duda recomiendo probar este plato si visitas este sitio, no te arrepentirás en absoluto.

Comimos de menú del día, judías con chorizo, pluma de cerdo y tarta de la embajada. Todo de 10. El trato del personal y la decoración muy buenos. Cuando volvamos a Cuenca repetiremos!!!

Fuimos atraídos por las buenas reseñas y no nos defraudó en absoluto. La comida excelente y el trato fantástico. Una pena que solo vayamos a estar un día.